En el Paso Pehuenche se realizó un encuentro junto a Senapred y diversas instituciones regionales, donde se presentaron los últimos antecedentes sobre la actividad del complejo volcánico y se definieron medidas preventivas. Además, se implementó un plan de comunicación orientado a entregar información clara y oportuna a la población.
De forma simultánea, se desarrollaron talleres en El Médano y El Colorado, comuna de San Clemente, espacios en los que los vecinos resolvieron dudas sobre el comportamiento de la Laguna del Maule y recibieron recomendaciones para proteger su seguridad. Estas actividades buscan fortalecer la educación en riesgos volcánicos y consolidar el vínculo con las comunidades.
El equipo central estuvo integrado por Álvaro Amigo y Pedro Berríos, de la Red Nacional de Vigilancia Volcánica y de la Unidad de Emergencias, respectivamente. Por su parte, la delegación regional contó con la directora Franca Murialdo y el geólogo Leonardo Espinoza.
Al respecto, Murialdo, subrayó la relevancia de la coordinación entre organismos técnicos y autoridades locales. “La alianza con los vecinos permite construir planes de acción más efectivos, asegurando respuestas rápidas y articuladas frente a cualquier eventualidad”.
Amigo, por su parte, destacó la importancia de la presencia en terreno: “La preparación de las comunidades es un eje fundamental en la gestión del riesgo volcánico. Nuestro compromiso es entregar información de manera accesible, para que las autoridades tomen decisiones oportunas y los vecinos comprendan la situación y adopten las medidas de resguardo necesarias”.
Los vecinos de las localidades visitadas valoraron la instancia y agradecieron la información entregada por Sernageomin y Senapred. “Estas jornadas nos dan tranquilidad y claridad sobre lo que está ocurriendo, además de enseñarnos cómo actuar frente a cualquier situación de riesgo”, señalaron representantes de las comunidades, destacando la importancia de contar con información confiable y oportuna directamente de los expertos.